Un almuerzo accidentado que te hará reír. Si estás almorzando y hablando por teléfono, te recomendamos que veas el cortometraje creado por Bram Van Rompaey y producido por el estudio belga Rabbit Hole.
Con una duración de solo 90 segundos, el cortometraje aprovecha al máximo su tiempo para narrar una historia encantadora centrada en los personajes, sin diálogos.
El corto sigue la vida de Joe, un operador de grúa de mediana edad con sobrepeso. Para él, el momento más destacado de su día es cuando suena la alarma del almuerzo. Sin embargo, su alegría se desvanece cuando la llave de su lata de frijoles se rompe, dejándolo sin comida. Con cada vez más frustración, Joe experimenta consecuencias catastróficas.
La animación en 3D de la película está hecha con gran maestría y su estética grotesca resulta sumamente divertida. Pequeños detalles como la forma de la cabeza de Joe, sus manos de tres dedos y los párpados manchados y venosos que cubren la mitad de su rostro crean una atmósfera juguetona que contribuye al humor bufonesco.
Lunch Break fue producido por Rabbit Hole en Amberes, Bélgica, con el apoyo del servicio de renderizado Rebusfarm.
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