Greyhound destructor USS Keeling, fue el nombre en clave que Tom Hanks le dio al destructor norteamericano, estas aventuras vienen inspiradas en la obra del novelista Cecil Scott Forester.
La historia cuenta como el Greyhound debía escoltar 37 barcos aliados al otro lado del Atlántico Norte pasando por encima de una flota de submarinos alemanes.
Todo lo que podemos ver en CG se ha recreado a partir de fotografías de la época, han intentado retratar todos los barcos y submarinos tal y como eran entonces.
Los problemas llegaron cuando la metodología de efectos visuales resultó ser problemática una vez que comenzó la postproducción.
Llegados ese punto decidieron contratar los servicios de DNEG, los efectos prácticos tuvieron que ser reemplazados por efectos visuales, VFX.
Aunque hay escenas en las que aparece la cubierta de un destructor real, el USS Kidd, en Baton Rouge.
El puente fue construido sobre un cardán para tratar de ayudar con el movimiento, pero muchas de las cosas prácticas no funcionaron tan bien como era necesario. Por eso tuvieron que trabajar en todas esas tomas mediante CGI.
Se trabajaron 1.300 tomas de efectos visuales, siendo el agua y los exteriores completamente CG. Gran parte del recuento de escenas era tratar tomas donde teníamos material en primer plano, como las escenas de diálogo.
DNEG visitó el HMS Belfast en Londres para hacerse una idea de cómo se construyeron realmente los destructores de la clase Fletcher y aplicó ese conocimiento a las versiones de CG.
El cielo fue trazado durante toda la duración del viaje de la película a través del Atlántico y determinó la fuente de luz para cada toma.
Fue fundamental crear la impresión de que la proa del Galgo se estaba estrellando a través del agua con la ayuda de la atmósfera como el aerosol del océano.
La intemperie de cruzar el Océano Atlántico era algo que faltaba en el rodaje práctico en el USS Kidd y se añadió a la versión CG del Galgo.
A pesar de que el agua era completamente CG, era importante para el supervisor de efectos visuales Nathan McGuinness era importante emular las condiciones reales en las escenas en el océano.
Una de las partes más difíciles es el movimiento del océano, así como la colocación de la cámara.
DNEG tenía 10 cámaras Canon 5D cada una colocada en un trípode individual que tomaba HDR de lapso de tiempo cada 30 segundos para producir un cielo de 60K, algo necesario para Greyhound.
Sin duda una película de estas características supone un gran trabajo en todos los sentidos, por un lado el aspecto e interés por parte de Tom Hanks en rodar todo lo posible con decorados reales.
Y por otro el trabajo de las compañías VFX para recrear a la vista todo aquello que era muy complicado de crear.
Las capturas lo dicen todo, seguro que visualmente es una película espectacular, no la he visto todavía.